sábado, 22 de agosto de 2009

ENTREVISTA A JACKSON EN LA REVISTA LA ESFERA . II PARTE



Sigue la entrevista: “¿Le han proporcionado á usted muchos ingresos sus obras?
-Por derechos de representaciones de mis zarzuelas se han pagado cantidades que rebasan el millón de pesetas. Más desgraciadamente, no he cobrado yo esa suma, que hay que descontar de un lado, la parte correspondientes mis colaboradores en los libretos y á los músicos, y de otro, una parte muy considerable que he dejado de percibir, en virtud de haberme visto obligado por mis apremios económicos, á vender la propiedad de laguna de mis primeras obras en vente ó veinticinco duros. Mis caritativos empresarios y editores, Alonso Gullón, Ducazal, Arregui y Arruej; y otros obtuvieron de ellas después pingües ganancias. ¬“. Esta situación no fue única en Jackson, sino que los abusos fueron generalizados y fue uno de los motivos del nacimiento del asociacionismo y del nacimiento de la Sociedad General de Autores (que posteriormente paso a denominarse Sociedad General de Auteres y Editores-SGAE).

“-¿Y cuál ha sido la que mayores beneficios le ha producido á usted?
-Chateau Margaux,que lleva dados más de treinta mil duros, cifra que es importante, si se tienen cuenta que en la época de su estreno se abonaba á veces por derechos de autos, en algunos teatros, hasta la irrisoria cantidad de dos pesetas.¡Qué diferencia con los tiempos actuales¡ “Las ciencias adelantan que es una barbaridad”.Por cierto que con respecto a Cháteau Margaux me acude a mi memoria una incidencia que quizá sea interesante.
-Dígala usted.
-Verá. Cuando estaba leyendo el libro al maestro Fernández Caballero, al llegar al momento de la romanza de la triple, el célebre músico, en una repentina inspiración, cogiendo el cantable de mis mano y poniéndolo sobre el atril del piano, me dijo: “A ver…espere…Ya está…” Y acto seguido improvisó el vals que comienza:

No se que siento aquí
Que el lama se encendió…
Y que luego había de popularizarse tanto.
-¿Qué artistas fueron los que más obras representaron de usted?
-De ellas recuerdo á Leocadia Alba, Loreto Prado-la genial intérprete de Los granujas, Los Chicos de la escuela y tantas más..,Lucrecia Arana, Luisa Campos, la Petrel, la Bru, las hermanas Segura y…que sé yo…Y de ellos José y Emilio Mesejo, Carreras…
-Oiga usted, don José:¿y no habrá en ese gratísimo recuerdo, por lo que atañe a las tiples algo más que gratitud y admiración puramente artística?
-Ya sé por donde va usted-nos ataja rápidamente-Pero no, señor; no hay nada de lo que usted insinúa. Las tiples para mí, siempre han sido una cosa muy seria y digna de mi mayor respeto…Las he considerado…¿Cómo diría yo?...,como herramientas de trabajo…,y por lo tanto, sagradas…Otras cosas diferentes pudiera confesarle respeto de las criadas de las tiples. No quiero , sin embargo, hacerlo, porque ello, como es natural, carece de interés. Prefiero, en cambio, referirle una anédocta que me sucedió con William Parish, el famoso empresario del circo del mismo nombre. Dicho señor deseaba á todo trance poseer u retrato mio en pose de luchador ade atleta. No sé por que tenia tal ocurrencia; pero el caso es que no cejaba en su empeño y continuamente me apremiaba á que le diese tal prueba de amistad. Al fin , un día me hice la consabida foto en mi cas, desnudo de medio cuerpo para arriba y en agresiva actitud. Mas luego me tuvo perplejo decidir que dedicatoria había de poner al retrato. Acabé mis dudas escribiendo sobre la fotografía lo siguiente:”Jackson . El colmo de la fuerza y desequilibrio, Sostiene veintidós niños con una pluma…””
-¿Y cual ha sido la última obra que ha estrenado usted?
-Los calabreses, en el Apolo de Madrid con música del maestro Luna, el año 1918.
Entre la primera-que como dije, fue estrenada en el año 70 en el Teatro Infantil (hoy Romea)-y la última, trascurrieron, pues, cuarenta y ocho años de activos servicios teatrales. Pero no quiero retirarme todavía definitivamente, como no sea que me retire el público. Tengo aun obras inéditas, algunas en colaboración con mi hijo Fernando, el único de los siete varones que me viven que ha desmostado ya aptitudes de escritor. Aunque él tiene varias cosas terminadas suyas, no quisiera morirme sin darle la alternativa.
-Desde luego, se ve cuánta ha sido su vocación dramática. Pero si no hubiera llegado á ser afamado autor de zarzuelas, ¿Qué hubiese preferido ser?
-Hombre, esa pregunta es difícil de contestar. Pero no, es fácil…Escuche usted: de no haber sido autor zarzuelero ni funcionario de Telégrafos, en cuyo Cuerpo llegué al alto puesto de inspector general, del que estoy jubilado actualmente, me hubiera gustado ser :ó canónigo, ó dictador, ó triple cómica.
-¿Y los honores y recompensas, le han agradado á usted?
-Nunca los he buscado, ni tampoco rehusado. Las cruces de Isabel La Católica y del Mérito militar blanca, que me concedieron por poesías mías, así como el premio de las flor natural, con motivo del centenario de D. pedro Calderón de la Barca, en el Fomento de las Artes de Madrid, son condecoraciones y diplomas que recibí con satisfacción y guardo con estima.
La charla con el autor de Los cuáqueros se prolongó todavía unos minutos más, mientras regresábamos reunidos de nuestro paseo por el Parque del Oeste, después de hacer acopio de oxigeno para nuestro pulmones”


NOTA; Incluyo nuevamente la foro que incluí en una entrad anterior relativa la hunor inglés de Jackson pues esa fotografía a la que se refiere en la anécdota del circo Parish.