lunes, 8 de octubre de 2012

Los hijos de José Jackson Veyán. Primera parte



Cuando en el título  hablo de los hijos de José Jackson Veyán, me refiero no a los del intelecto, sino a los de carne y hueso. Ya en una de la primeras entradas del blog me referí al dato sobradamente conocido de que José Jackson Veyán, que curiosamente fue hijo único, llegó a tener 22 hijos. En la familia únicamente conocíamos los nombres de aquellos hijos que llegaron a la edad adulta: Arturo, Pepe, Beatriz, Pepita, Angelita, Luis, Enrique, Amalia, Federico, Fernando y Mariano. Sin embargo en todos estos años, investigando, he conseguido poner nombre a unos cuantos  de los que desconocíamos su existencia, y todavía faltan muchos. Como  La familia de Jackson Veyán fue una de las primeras entradas vengo a refrescarla para aquellos interesados en ella, pero añadiendo, en el caso que tengamos, alguna foto.

José Jackson Veyán se casó en primera nupcias en 1876 con la asturiana Carmen Álvarez García. Carmen falleció a los 27 años de edad en la localidad de Leganés (Madrid) donde se encontraba destinado su marido el 18 de enero de 1884, a los pocos días de haber dado a luz a la última de sus hijas.


¡NO TE ENGAÑABA!
Á mi esposa, en su Santo
Hace una año…¿Te acuerdas? Yo amoroso
la fe de mi cariño te juraba.
Hoy ante dios y el mundo soy tu esposo.
¿Lo ves…?¿No te engañaba!

¿Te prometí mi amor? Tuyo es entero.
Te dije que era eterno, y no se acaba.
Si mucho te quería, más te quiero…
¿Lo ves…?¡No te engañaba!

Yo te hable de un tesoro de delicias
que el tálamo en su trono te guardaba.
Hoy tienes un tesoro en mis caricias…
¿Lo ves…? ¡No te engañaba!

Yo te hablé de ese amor santo y prolijo
que en nuestra dulce unión su cuna hallaba
y mañana, mirándote un hijo,
dirás…¡No me engañaba!

Y siempre, al recordar en este día
lo que años anteriores te juraba
llena de amor, de paz y de alegría
dirás…¡No me engañaba!
16 de julio de 1876

De ese primer matrimonio, nacieron que sepamos 5 hijos:

María Jackson Álvarez, su primera hija, nacida en Madrid en enero de 1877 y que fallecería victima de la difteria en Alcalá de Henares en noviembre de 1889.


Á MI ESPOSA
EN EL NATALICIO DE NUESTRA QUERIDA HIJA
Te sentías morir, y es que otra vida
su ser hallaba en ti.
Llanto, angustia, dolor…¡Cual se parecen
el nacer y el morir!

¡Ay, con cuantos pesares se conquistan
la dicha y la virtud!
¡Cada instante de vida es un Calvario!
¡Cada paso es una cruz!

Crece el dolor y el llanto; ya eres madre.
¡Respira, corazón!
¡Una niña: otra mártir, otra victima
del yugo del amor!

Ella es el ángel que une nuestras almas
con lazo celestial.
Tengo que amor a dos, y, sin embargo,
Te quero mucho más.

¿Qué misterioso encanto es el que siento
que me hace tan feliz…?
Es la pasión de padre…¡La mas pura
Que se ha albergado en mí!

Mírala cómo duerme entre tus brazos.
¡Bésala como Yo!
¿No das por bien sufrido tu martirio,
Si tal palma logró?

Tú una santa, ella un ángel…En mi dicha
¿qué mas puedo pedir?
Sólo ambiciono, Carmen, una cosa:
¡que se parezca a ti!

Se aumenta mi cariño y mi esperanza.
¡Cuán dichosos lo tres!
Un ángel ha nacido en nuestro lecho;
vivamos para él.

Le faltaba esta prueba imponderable
al amor conyugal.
Nos faltaba esa cuna y esa niña…
¡Esa luz del hogar! Ante el ara nupcial, el sacerdote
Bendijo nuestra unión
¡Fuimos esposos, si, pero hasta ahora
no nos bendijo Dios!.

Madrid 7 de enero de 1877

Arturo Jackson Álvarez y su mujer




Arturo Alonso  Eduardo Jackson Álvarez, nacido en Vicalvaró (Madrid)  el 23 de enero de 1878 casado con Consuelo Sebastián Jarza en la parroquia de San Gil de Zaragoza el 15/08/1915 y que murió sin descendencia.








A MI HIJO ARTURO

Derecho y

 de buena traza
formal en toda ocasión;
Blanco y rubio…¡Puro Albión!
tú no desmientes la raza.

De la vida en los reveses
ser inglés fortuna es.
¡Más te vale ser inglés
Que no tratar con ingleses!

Si el hablar torpe te amarga,
súfrelo, que eso no te mengua;
y es tener media lengua
mejor que tenerla larga.

Según dice en loco anhelo
la familia, tú eres ya
la efigie de tu papá
y el retrato de tu abuelo.

Y aunque en fealdad me iguale
mi Arturo (que no hay tal cosa),
yo diré siempre…¡Dichosa
La rama que del tronco sale!







 Beatriz Juan Josefa  Jackson Álvarez, quien nació en Vicalvaró (Madrid) el 3 de septiembre de 1879, y murió en Leganés, a los 33 años de edad , el 17 de junio de 1912. Beatriz se casó  en Leganés con Pablo Durán y Pérez de Castro estableciendo su residencia en dicha localidad donde  su marido Pablo era el farmacéutico y miembro de una importante familia que dio varios Alcaldes a la villa. Ha  su fallecimiento dejo seis hijos, María Trinidad (la única de la que sólo hoy en día queda descendencia), José , Elvira, Mª de los Dolores, Pablo y María.

 
¡Las últimas flores!

A la memoria de mi hija Beatriz
Las corté llorando
y regué sus hojas
saliendo a raudales
la pena más honda.
Abrí, medio loco,
la caja mortuoria
y cubrí su cara
con mi ofrenda póstuma.
¡Suspirando amores,
claveles y rosas
besaron sus ojos,
besaron su boca,
fría como y hielo
de la fría losa,
y las pobres flores
perdieron su aroma,
doblaron su cáliz,
y al tocar llorosas
en su labios muertos,
se murieron todas!
¡Benditas las flores…!
¡Mil veces dichosas,
lograron con ella
subir a la Gloria…!
¡Que envidia que os tengo,
Claveles y rosas!

Llegué al cementerio,
y antes que la fosa
se hundiera la caja,
con mano temblona
cogí algunas flores,
las lleve  a mi boca,
la guarde en mi pecho,
y andando sin sombra,
di la vuelta al nido
donde mi paloma
sus seis palomitos
cuidaba afanosa;
y allí, ¡qué preguntas
tan incentonas…!
-¿Dónde está mi madre?
-La has dejado sola?
-¡Que vuelva esta noche!
-¡Que no sea tonta,
Que yo no me acuesto
Si ella no me arropa…!
Yo saque las flores;
repartílas todas
a los huerfanitos
y al ver cómo ansiosas
repartían besos
aquellas seis bocas,
suspiré ocultando
mis tristes congojas…

¡Que envidia que os tengo
claveles y rosas!
-
¡Duerme, Beatriz mía,

duerme sin zozobra,
que en el cementerio
no estás nunca sola!
¡Allí, por las noches,
se alzará la sombra
de tu pobre madre
que al lado reposa!
¡Velará tu sueño…!
¡Cantará tu historia;
la historia de niña
en dulces estrofas…!
Las madres como ella
reviven gozosas
por besar la tumba
de la hija que adoran
¡Cuando te enterramos
yo ví la losa
que cubre su nicho
se movía sola..!
¡Es que se asomaba
 tu madre angustiosa,
y el sitio en que duermes
sabe de memoria!
-
¡Muertas de mi vida…!
Ya os veo afanosas
que al pie de la tumba,
juntitas y solas,
cruzáis vuestros brazos
 y unís vuestras bocas!
¡Brillando en el cielo
la luna medrosa
dará luz al grupo
con nimbos de Gloria…!
¡Las flores que cercan
las fúnebres losas
os darán perfumes
abriéndose todas…!
¡Dos almas juntitas…!
¡Dos bancas plomas
que tras larga ausencia
se arrullan a solas…!
¡Que envidia que os tengo,
claveles y rosas!






José Jackson Álavrez y su esposa.


José (Pepe) Jackson Álvarez, nacido el 23 de septiembre de 1882, quien se caso con Concepción Sánchez Barran, y falleció sin descendencia. Fue el único hijo de Jackson Veyán que ingreso en Telégrafos





Amelia Juana Jackson Álvarez, nacida en Leganés el 13 de diciembre de 1883, y que debió de fallecer siendo niña, pues a ciencia cierta en 1894 ya no vivía. Fue seguramente consecuencia de una complicación del parto que su madre falleció apenas un mes después de su nacimiento.

Actualización a 25 de marzo de 2013: he actualizado los datos de Arturo y Beatriz gracias a la colaboración de la Asociación de Investigación Histórica de Vicalvaró  Vicu Albus. 

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